martes, 21 de septiembre de 2010

DEBATE SEMANAL: EL ABANDONO DEL FÚTBOL REGIONAL


Esta semana queremos hacer mención especial al abandono y despreocupación institucional que sufre el fútbol regional. Según la información que nos ha llegado y la que hemos buscado, nos consta que el problema que vamos a plantear se produce en casi todas las comunidades españolas, pero por cercanía y mayor cantidad de información vamos a centrarnos en la Comunidad de Madrid principalmente.
En esta Comunidad, a pesar de ser la capital y una de las más importantes en el panorama nacional, de ser una de las comunidades con mayor número de equipos y de jugadores federados, las ayudas que reciben los clubes para salir adelante son escasas, más bien inexistentes.
Allá por el comienzo del nuevo siglo, la Alcaldía de la Comunidad de Madrid se llevó
mil y un elogios por dar su palabra a que todas las instalaciones que fueran utilizadas por, al menos, un club federado con asiduidad cambiarían su superficie de tierra por otra de césped artificial antes del 2005 con el objetivo de fortalecer el deporte y sus valores entre los más jóvenes. Debido a que el presupuesto era mayor del previsto y el número de campos de fútbol utilizados por los equipos federados era muy numeroso, con el fin de mantener su promesa decidieron darse tres años más de margen, hasta 2008, para poder cumplir su palabra y los objetivos propuestos. Hasta aquí, todo correcto: buenas palabras, instalación de césped artificial en numerosos campos de la comunidad y alegría dependiendo del barrio, ya que con el fin de conseguir una buena planificación, las obras comenzaron por distritos. De ahí viene el problema con el que nos encontramos actualmente. Estamos a finales del año 2010, diez años después de la promesa, cinco después del periodo pactado inicialmente y dos por encima del límite prometido, y todavía hay multitud de campos en los que las obras ni siquiera han sido proyectadas. El plan ha caducado y lo ha hecho perjudicando a los de siempre, por desgracia. Los equipos con menos recursos, los que jamás podrían permitirse la instalación de la nueva superficie, los que domingo tras domingo están condenados a dejarse las rodillas en un campo de tierra tras soñar durante diez años con un terreno mejor en el que disfrutar de su deporte favorito: el fútbol.
Y es que los equipos más adinerados y con mejores relaciones con los políticos son aquellos que se
llevaron primero el gato al agua, y, por consiguiente, las mejores instalaciones (entre las que se incluyen además del terreno, vestuarios). Otros somos los que pudimos “cazar” algo y, por lo menos, vimos como nuestro sueño de jugar en hierba artificial como locales se cumplió, aunque los vestuarios siguieran siendo los antiguos. Otros, por desgracia para todos, todavía siguen soñando con poder hacerlo. Muchos equipos se quejan porque tienen que ir a jugar en arena un domingo o dos cada mes, pero muchos otros son los que juegan todos los partidos y entrenan todas las semanas en esas superficies.
Numerosos equipos a lo largo de nuestra Comunidad tienen este problema que les afecta peligrosamente a su existencia, ya que los chavales del club, como en todas las facetas de la vida, prefieren la comodidad de jugar en un campo de hierba, y se van a otros equipos con más recursos. Y así, tantos y tantos niños, chavales, adultos. Estos equipos han decidido seguir en pie, contando con los más fieles al escudo, con los de toda la vida, resignándose a sobrevivir en el abandono institucional. Por eso, solo nos queda decir lo siguiente: ¡campos de hierba ya!